La caída del rey de Lidia, Candaules, es uno de los relatos griegos más fantásticos narrado por el historiador Heródoto de Halicarnaso.
Cuenta Heródoto que Candaules estaba muy enamorado de su esposa y pensaba que poseía a la mujer más hermosa del mundo. Entre sus guardias de mayor confianza se encontraba Giges. Un día, Candaules empezó a alabar las virtudes de su mujer ante Giges y al final, creyendo que éste pensaba que él exageraba, le dijo: “Giges, me parece que no te convenzo cuando hablo de mi mujer, pues los hombres dan menos crédito a los oídos que a los ojos, así que haz de verla desnuda”.
Aquí se presenta un dilema moral.Si Giges acepta y observa a la reina, sería un acto inmoral y deshonesto, ya que contemplaría desnuda a la mujer de otro hombre y, además su propia reina.También lo considero una falta de respeto hacia ella, ya que ella sería observada sin ser consciente de ello. Por otra parte, comprendo que pudiera aceptar debido al miedo a la actitud del rey al no ser obedecido y al deseo de no resistirse a la tentación de verla desnuda.
Giges se negó defendiendo “Al despojarse una mujer de su vestido, se despoja con él de su recato.Yo estoy convencido que es la mujer más hermosa de todas las mujeres, y te ruego que no me pidas cosas fuera de la ley”.
Pero,a pesar de sus intentos,no pudo Giges desechar la idea del rey y la insistencia de éste fue tanta que Giges terminó aceptando.
En su lugar yo no habría aceptado,ya que me pondría en el lugar de ella al darse cuenta de que su propio marido invita a su guardia a contemplarla desnuda. Pienso que ésta además de traicionada, también se sentiría avergonzada por el hecho de ser vista sin ropa por otro hombre. Es un acto que no cometería porque me pesaría en la conciencia.
Los valores que veo que intervienen en este dilema son: honestidad, respeto, humildad y lealtad.
Dicho y hecho, Candaules introdujo a Giges en la habitación de su esposa y lo escondió detrás de una puerta. Al llegar su mujer,todo se desarrolló como el rey lo había previsto, excepto por el hecho de que la mujer se dio cuenta de lo ocurrido, aunque no dio la voz de alarma.
Al día siguiente la reina hizo llamar a Giges, quien no sospechaba de lo que le iba a suceder. Fue entonces cuando ella le presentó el segundo dilema moral del relato. “De los dos caminos que hay te doy a escoger cuál quieres seguir: o matas a Candaules y me posees a mí y al reino de los lidios, o tienes que morir al momento, para que en adelante no obedezcas en todo a Candaules ni mires lo que no debes. Así pues, o ha de perecer quien tal cosa ordenó o tú, que me miraste desnuda y obraste contra las normas”.
Si Giges mata al rey, además de no perder su vida, su posición se vería mejorada, ya que obtendría el reino y la hermosa reina. Por otra parte, el simple hecho de que la esposa se hubiese dado cuenta no es motivo suficiente para arrebatarle la vida a una persona, y menos tratándose del rey, al que le debe lealtad. Pero, entre sobrevivir o morir, la mayoría elegiría lo primero, aunque conllevase el asesinato de una persona.
Giges no podía articular palabra por la sorpresa y, después de un momento de duda decidió matar al rey. Cuando quiso ser coronado fue fuertemente resistido, así que expuso su caso al oráculo de Delfos, que le dió la razón. Giges en agradecimiento hizo un importante regalo en oro y plata.
En su lugar, yo también habría actuado de esa forma, ya que siempre optamos por mirar antes por nosotros mismos que por los demás, y más tratándose de un caso de vida o muerte.
Los valores que se tratan en este dilema son: lealtad, cobardía, ambición y supervivencia.
Por último, me parece que los dilemas que se cuentan en el libro tienen cierta relación con los que transcurren en la historia entre Katherine y Almásy.
